Si quieres saber cómo curar la ansiedad, en esta página vas a encontrar la respuesta. Probablemente hayas probado muchas cosas para intentar solucionar ese problema: infusiones, pastillas, medicamentos, terapias psicológicas, tratamientos alternativos, o incluso hayas acudido a un psicólogo. Probablemente todo eso fracasó. ¿Quieres saber por qué? Porque no eliminó las causas de la misma, sino que atacó sus síntomas sin corregir su causa. Soy Carlos  Valverde, he sufrido de ansiedad severa hasta los 24 años. Tenía Trastorno Obsesivo Compulsivo, Trastorno de Ansiedad Generalizada, y fobia social. También yo probé todo tipo de terapias y remedios, hice psicoterapia con 2 psicólogos, y aunque los síntomas se redujeron algo, tampoco con eso conseguí curarme.

Mi curación fue el resultado de varios factores que explico en esta página. Puedes saber más acerca de mí en la sección Sobre mí, pero lo importante no es mi historia sino la tuya. Lo importante es que puedas curar tu ansiedad. Voy a ser muy directo y a decirte qué debes hacer para sanar:

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Asumir la responsabilidad de curación, asumir que curarse implica un esfuerzo, requiere de fuerza de voluntad, y disciplina para ser constante en la realización del tratamiento. Eso es algo que nadie puede hacer por ti. Si tienes el deseo firme de luchar por tu propia curación, empiezas con buen pie.

 

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Descargar el primer capítulo del Método LIBOC, para ello, tan sólo debes clicar la imagen del ebook de la parte superior derecha de esta página e introducir tu nombre y email. Luego te llegará un mensaje a tu correo, en el cual podrás descargar el dosier.

 

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 Leer el dosier, y leer esta web. Con ello entenderás en qué consiste este abordaje terapéutico del Método LIBTOC, cuales son las causas de la ansiedad, y por qué la mayoría de terapias fracasan.

 

condicion-curacionLeer los mensajes que recibirás en tu email, y empezar a hacer los ejercicios del Método LIBTOC (buena parte del Método se explica de modo gratuito en algunos de esos mensajes). Por supuesto estos mensajes son gratis, los recibirás por el simple hecho de haber descargado el primer capítulo, y puedes dejar de recibirlos siempre que lo desees.

 

Este es el plan de ruta a seguir para superar la ansiedad. Yo probé todo lo habido y por haber, y sólo me curé cuando conseguí estas 3 cosas que comento a continuación, que son los 3 objetivos que persigue el Método.

 

Las condiciones para la curación

Estas son las condiciones que deben darse para poder cortar este asunto de raíz, es decir, corregir el trastorno de ansiedad responsable de tus síntomas:

 

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Dejar de identificarse con los pensamientos. Esto es, aprender a no creer las historias que te cuentan tus pensamientos. Todos sabemos que esta emoción negativa aparece como respuesta a los pensamientos negativos (conscientes o inconscientes), pero muchas personas no saben que es posible aprender a no creer las historias negativas que sus pensamientos les cuentan. Obviamente ello requiere una metodología que hay que seguir y practicar. Mientras sigas creyendo todas esas cosas negativas que tu mente te cuenta a través de pensamientos, difícilmente podrás realizar avances a la hora de superar el problema.

 

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Cambiar una serie de patrones mentales que son responsables de que tengas tendencia a ser pesimista, a tener pensamientos negativos, y con ello a sufrir problemas de ansiedad, fobia social u otras fobias, Trastorno Obsesivo Compulsivo, u otros trastornos de ansiedad.

 

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En algunos casos (no en todos), también se hace necesario conseguir que determinadas emociones reprimidas que tenemos en la mente inconsciente accedan a la consciencia. Muchas personas albergan en su mente inconsciente una elevada carga de emociones negativas como odio, rencor, baja autoestima, culpa, pánico, sentimiento de humillación, etc. La mayoría de esas emociones reprimidas en el inconsciente, son consecuencia en gran medida de traumas de la infancia o de los primeros años de la adolescencia. Como su nombre indica, son emociones inconsciente, esto es, que están fuera de la conciencia, la persona no es consciente de la existencia de dichas emociones en su interior.

 

Todos estos puntos son los objetivos que se buscan en los ejercicios del Método LIBTOC, que son los ejercicios que te enseñan cómo curar la ansiedad; los que pueden devolverte a una vida de felicidad y libertad.

 

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Comprender el problema

Lo primero que debes tener en cuenta, es que estamos hablando de una emoción, una emoción negativa que forma parte de nuestra biología, y que muchas veces es sólo un síntoma de un trastorno que es el verdadero asunto a tratar. Este trastorno puede ser el Trastorno de Ansiedad Generalizada, la fobia social, la agorafobia, el Trastorno Obsesivo Compulsivo, la timidez, los ataques de pánico, una fobia, el trastorno por estrés postraumático, el miedo a hablar en público, etc

Es ese problema el que hay que tratar, puesto que la ansiedad es sólo un síntoma, siempre hay que corregir su causa. Si sufres esta emoción negativa de forma recurrente desde hace tiempo, lo más probable es que padezcas alguno de estos trastornos, aunque cabe la posibilidad de que ni siquiera lo sepas.

No existe ningún tratamiento médico ni psicológico que produzca la curación de forma inmediata (porque esta es sólo un síntoma, y no una enfermedad). Si quieres conseguir superar este problema, debes aprender a corregir sus causas, y eso requiere esfuerzo y disciplina. Quiero decirte algo que puede parecerte duro, pero es una realidad que debes saber, que debes tener presente en todo momento: nadie ni nada puede curarte. Solo tú te puedes curar a ti mismo, y las terapias como el Método LIBTOC, el psicoanálisis, la psicología cognitivo-conductual, u otras terapias son sólo el mapa, el vehículo a través del cual tú te sanas a ti mismo. Si has tomado medicación para tus síntomas, ya debes saber que los ansiolíticos sólo calman los síntomas pero no curan, y a la larga pueden producir dependencia. Aunque a veces son necesarios, no son ninguna solución a largo plazo, sino simplemente un parche para calmar la ansiedad durante unas horas. No puedes depender toda la vida de los ansiolíticos.

El primer paso para sanarte, es que hoy, en este mismo instante, te comprometas a luchar por corregir las causas de tu problema, y en ello sí puedo ayudarte. Si el compromiso que tomas hoy es fuerte, y lo sigues hasta el final, podrás conseguirlo. Si este problema te ha producido ya demasiado sufrimiento y dolor en tu vida, si estás realmente mal, ese dolor emocional será la mejor motivación para luchar para poder curar la ansiedad. Hay veces en que necesitamos tocar fondo para darnos cuenta de que no podemos seguir así, que tenemos que salir de esa situación sea como sea. Al menos así fue en mi caso, hasta que no me vi totalmente “jodido”, no conseguí una determinación lo suficientemente grande como para hacer LO QUE SEA con tal de curarme. Ese es el significado que tiene la palabra “hoy” en la dirección web de esta página (comocurarlaansiedadhoy.com). No es que hoy tu problema vaya a desaparecer, sino que hoy el compromiso que adquieras con tu curación tiene que ser tan tan grande y firme, que te va a dar las fuerzas necesarias para poder alcanzar un objetivo tan complejo.

 

¿Pueden curar la ansiedad las terapias habituales?

curar-la-ansiedadEsta pregunta es realmente compleja de responder. La respuesta sería que en algunos casos sí, pero en la mayoría no. Antes de hablar de terapias quiero hablar de remedios caseros: infusiones de tila, pasiflora, ginseg, valeriana, y de medicamentos ansiolíticos o pastillas naturales. En estos casos es obvio que estas no pueden curar la ansiedad, sino sólo reducirla durante el tiempo que dure el efecto de las sustancias ansiolíticas. Una vez estas sustancias se eliminan del torrente sanguíneo, la intensidad de la emoción negativa vuelve a niveles anteriores, con lo cual una persona necesita volver a tomar el remedio o medicamento para que el efecto ansiolítico persista. En este punto debo recordar que no debes automedicarte, ni subir o bajar la dosis de la medicación sin la supervisión de tu médico.

 

Veamos ahora algunas terapias psicológicas como EFT, TAT, EMDR Psych-k (estas en concreto son terapias que se incluyen dentro de la rama de la psicología energética, yo las probé todas). Estas no suelen conseguir tal objetivo porque su efecto es temporal. Si bien pueden conseguir una disminución o incluso eliminar la ansiedad, esta mejoría dura muy poco tiempo porque los pensamientos negativos inconscientes van a persistir.

También probé otras tearapias psicológicas, como la Programación Neurolingüística -PNL- (esta me ayudó algo aunque la mejoría fue moderada y especialmente se centró en el ámbito de la fobia social), el Código de la emoción, El Proceso de la presencia, las afirmaciones, etc. En general estas terapias me ayudaron muy poco. Su problema es que no actúan a nivel causal, sino a nivel de las consecuencias. No estoy diciendo que estas técnicas no sirven, sino únicamente que a mí no me sirvieron, y que ello es algo que sucede a muchas personas por las experiencias que me cuentan muchas personas que me escriben por correo.

Respecto a la psicología cognitivo-conductual, esta puede ser de ayuda, y en algunos casos sí puede producir la curación. El principal problema que esta presenta es que no actúa a nivel de la mente inconsciente, por lo que no cumple las 3 condiciones antes mencionadas. Cumple la primera, y en ese sentido sí es de gran ayuda, puesto que enseña al paciente a cambiar el modo en que se relaciona con sus propios pensamientos, ideas y creencias, así como su toma de decisiones y su comportamiento. Incluso en algunos casos puede que cumpla también la segunda condición, esto ya depende del enfoque de cada psicólogo y de su especialización formativa; pero no la tercera.

Esa tercera condición sólo se consigue cuando recurrimos a técnicas como el psicoanálisis, el Método LIBTOC, o incluso la BioNeuroEmoción. El psicoanálisis puede ser de especial interés en el caso del TOC, la fobia social, y la agorafobia, y frecuentemente en estos casos funciona aún cuando todo lo que anteriormente había probado la persona había fracasado. Su principal inconveniente es que es un tratamiento que requiere muchas sesiones, por lo que la terapia resulta cara, lenta, y muchas veces tediosa. Un punto importantísimo si deseas investigar esta vía de curación, es que busques un buen psicoanalista, sería un error buscar un psicoanalista con poca experiencia.

 

La curación de los trastornos de ansiedad

Hay que decir que la ansiedad es simplemente un síntoma, una emoción negativa altamente desagradable, pero que no es en sí misma una enfermedad. Por tal motivo, es más apropiado hablar de superar la ansiedad que curarla, porque no es algo que vaya a hacer alguien por tí, sino que la curación es algo que sólo tú puedes conseguir.  La complejidad de superar una agorafobia o un caso de fobia social, siempre será mayor que superar un Trastorno Obsesivo Compulsivo, aunque gran parte del tratamiento será prácticamente el mismo. Detrás de un trastorno de ansiedad, hay un funcionamiento mental no armónico caracterizado por la negatividad y el pesimismo (el cual a su vez tiene otras causas más profundas), el problema está en la relación que tú tienes con tus propios pensamientos y tu propio psiquismo, en el “diálogo interno” que se produce en tu mente. Pero debes entender que gran parte de ese psiquismo es inconsciente. Esta emoción negativa manifiesta dos fenómenos que ocurren en tu interior:

1) Los pensamientos negativos, o más bien, un diálogo interno negativo caracterizado por la presencia de miedos y el pesimismo.
2) El hecho de identificarte con tus pensamientos (creer las cosas e historias que estos pensamientos te cuentan).

 

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En la práctica se ha visto que curar un trastorno de ansiedad, es más complicado en los casos en los que hay que salir de la zona de confort emocional. El problema es que en los casos de agorafobia y fobia social, dicha zona de confort emocional es muy reducida, por lo que el individuo va a tener que exponerse repetidamente a conductas y actitudes que estén fuera de dicha zona emocional, y eso conlleva enfrentarse una y otra vez a sus miedos y a sus emociones negativas. Esto es una experiencia muy desagradable desde el punto de vista emocional, apareciendo lo que se conoce como “auto-boicot”. Este consiste en que aún cuando el paciente sabe qué es lo que debe hacer, en el sentido de que aunque sabe cómo curar su ansiedad, trata de evitar el dolor emocional de exponerse a determinadas situaciones angustiantes como consecuencia de un mecanismo inconsciente de protección emocional, con lo que la limitada zona de confort emocional nunca se expande, y la mente se convierte en una cárcel invisible.

Estos dos puntos mencionados antes (los pensamientos negativos y el hecho de creer las historias que nos cuenta nuestra mente), están presentes en los trastornos de ansiedad, como por ejemplo el Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG), la timidez y la fobia social, la agorafobia, el miedo a hablar en público, o simplemente la tendencia a preocuparte por el futuro.
Hay que decir que tanto el punto 1 y 2, tienen a su vez unas causas más profundas, que tienen que ver con tu mente inconsciente en relación a experiencias de la infancia, la educación recibida y la programación social, los traumas emocionales, la sobre-protección de los padres, las habilidades sociales, o el sistema de creencias de una persona, entre muchos otros.

 

La terapia cognitiva

Esta terapia muchas veces tiene una eficacia relativa, porque para curarte, debes hacer un trabajo a nivel de la mente inconsciente. El problema es que la mayoría de terapias psicológicas, incluyendo la terapia cognitiva (lo que conocemos como “ir al psicólogo”), trabajan a nivel de la mente consciente y no a nivel de la mente inconsciente, y de ahí que su éxito no sea absoluto en la mayoría de casos. La terapia cognitiva, está enfocada a modificar el punto 2 anteriormente citado, o más bien a cambiar un diálogo mental negativo, por otro positivo; a modo de metáfora diríamos que se enfoca en cambiar una película mental negativa por otra positiva.

En algunos casos, sí se nos enseña a comprender que la película no es la realidad, sino un sueño que ocurre en la pantalla de nuestra mente, que esas historias que nos cuenta nuestra mente en forma de diálogo interno, son sólo fantasías. A modo de metáfora, podemos decir que un pensamiento negativo es  una fantasía proyectada en un cine, en la pantalla de nuestra mente, un cine en el que nosotros somos los espectadores de la película y no su protagonista. El problema es que frecuentemente la psicología cognitiva intenta cambiar una película mental negativa por una positiva, sin hacernos conscientes de que el problema no está en la historia de la película, sino en el hecho de confundir una película con la realidad.
Por tanto, ahora ya sabes que si deseas superar la ansiedad, probablemente vas a tener que someterte a terapias que trabajen sobre la mente inconsciente, con lo que la pregunta esencial, es esta ¿Cuáles son estas terapias? Básicamente son el psicoanálisis y la BioNeuroEmoción.

 

El Método LIBTOC

El Método LIBTOC, es un sistema curativo psicológico y no médico (no requiere la ingesta de medicamentos ni alimentos, ni plantas, etc), es decir, es una metodología paso a paso que es efectiva para curar la ansiedad. Aunque inicialmente fue creado enfocándose especialmente en el tratamiento del Trastorno Obsesivo Compulsivo, la experiencia ha demostrado que es igual de efectivo para el tratamiento de la fobia social, y el TAG. Todavía no existen datos fiables acerca de su efectividad en el caso de la agorafobia.

El Método LIBTOC, combina principios de la psicología transpersonal, la BioNeuroEmoción y la psicología analítica. Está conformado por 3 bloques, en los que cada uno se orienta a un objetivo particular, siendo el primero de ellos una metodología para aprender a no identificarse con los pensamientos (no creer los pensamientos negativos que aparecen en tu mente y que son en gran medida los responsables que que se genere esta emoción negativa). El segundo y tercer bloque, se enfocan a cambiar las estructuras mentales que son responsables de la aparición de dichos pensamientos negativos y los síntomas.

La efectividad de curación está en torno al 50 % en el caso del TOC y el Trastorno de Ansiedad Generalizada, siendo algo inferior en el caso de la timidez y fobia social. No obstante, aún en la mayoría de casos en los que no se consigue la curación, se experimenta una disminución de los síntomas.

Este es el método curativo que yo recomiendo, en primer lugar porque está basado en mi propia experiencia de curación, que se produjo tras haber probado sin éxito decenas de terapias, entre ellas la terapia cognitiva, que aunque redujo la intensidad de mis síntomas, no me curó. El Método LIBTOC es la guía definitiva paso a paso sobre cómo curar la ansiedad. ¿Deseas saber más sobre el Método LIBTOC? Descárgate gratis el primer capítulo aquí:

 

Curar la ansiedad con psicoanálisis.

Terapia desarrollada por el prestigioso Sigmund Freud, y remodelada por su colega y alumno Carl Gusta Jung. Es una terapia muy poderosa, no obstante cuenta con el inconveniente de que en la mayoría de casos se necesitan un número elevado de sesiones para poder experimentar mejoría, con lo que su conste económico acostumbra a ser elevado. Por otro lado, hay que buscar a un buen psicoanalista. Es una disciplina compleja, se requieren muchos años de estudio y de experiencia clínica para ser un buen psicoanalista.

 

BioNeuroEmoción.

Terapia desarrollada por Enric Corbera, que engloba un conjunto de metodologías de tratamiento. La Bioneuromoción profundiza en una idea que fue desarrollada por Carl Gustav Jung hace ya casi 100 años, que es el inconsciente colectivo, y el inconsciente familiar. La Bioneuroemoción nos demuestra que nuestro psiquismo está fuertemente influenciado por una serie de información que se transmite de una generación a otra en el clan familiar. Se basa en los principios del estudio del árbol genealógico, de la Nueva Medicina Germánica (disciplina desarrollada por el prestigioso y polémico Dr. Hammer), de la hipnosis Ericksoniana y del proceso de individuación (liberación de programaciones familiares, culturales y sociales) y reconexión con lo que en psicoanálisis se conoce como el Yo o Id.

 

En conclusión

Muchas personas no saben cómo curar la ansiedad. Muchas veces el trabajo con un psicólogo es algo necesario, aunque muchas veces no suficiente. Si te preguntas si la terapia cognitivo-conductual es la respuesta correcta, la respuesta es que sí, aunque sólo en parte, porque en la práctica raramente se consigue la curación al 100%. Si se modifican los patrones cognitivos conscientes pero no los inconscientes, los resultados puede que no sean los deseados. Muy probablemente el paciente mejorará pero es imposible saber si hasta el punto de curarse totalmente.

En cuanto a la medicación, puede ser de mucha ayuda, el problema es que los ansiolíticos eliminan los síntomas de la ansiedad, y no su causa, digamos que es un parche temporal que reduce la intensidad de la emoción negativa, pero no la elimina. Sin embargo, algunos medicamentos pueden producir adicción si se usan durante tiempo muy prolongado, con lo que luego puede ser complicado abandonarla. Siempre debe ser un médico el que marque las pautas a seguir en relación a la medicación.
El psicoanálisis puede ser muy interesante, especialmente si se combina con la terapia cognitivo-conductual, puede ser una terapia muy profunda y transformadora, pero frecuentemente es larga y costosa, tanto en tiempo como económicamente.

El Método LIBTOC es un sistema de autotratamiento (que sigue cada persona desde su propia casa y a su propio ritmo), y puedes empezarlo si te descargas el primer capítulo en esta página, puesto que te llegarán al correo mensajes cada pocos días en los que profundizo en la comprensión de los trastornos de ansiedad, en la dificultad para superarlos, o en su causa, y en los ejercicios. Lo más importante de estos mensajes es que son gratis, y muchos de ellos incluyen la explicación detallada de muchos de los ejercicios del Método LIBTOC, de modo que no tienes ninguna excusa para no intentarlo. En pocas semanas vas a empezar a comprobar que mejoras y eso te dará fuerzas para seguir luchando por superar este problema.

 

Ahora, tienes más cerca que nunca la posibilidad de dejar atrás la ansiedad, de volver a ser libre, feliz, y a tener paz mental. La decisión que tomes ahora (si adquieres o no ese compromiso del que te hablé más arriba), puede marcar el destino del resto de tu vida.

 

Puedes descubrir más información sobre el Método LIBTOC aquí.